Cada nuevo curso o cada nuevo año implica nuevos propósitos,
nuevos objetivos y hacer balance de lo conseguido en el curso que dejamos
atrás. Solemos valorar el balance en positivo si hemos conseguido lo
que queríamos o lo que nos habíamos propuesto y en negativo si no lo hemos
logrado. Pero estas vacaciones mientras estaba sentada en la toalla de la
piscina viendo a mi hija chapoteando y riéndose a carcajadas me pregunte:
porque no es este tu objetivo diario? Porque en lugar de levantarte por la
mañana y pensar tengo que hacer tal o cual tarea, ir a tal sitio, comprar tal
cosa…. Porque el objetivo del día no es hacer reír a tu hija? Pasar un rato
agradable en familia, preparar una buena cena y tener una conversación con tu
50%?
No solemos marcar este tipo de objetivos en nuestras agendas
ni en nuestros calendarios, está muy bien tener objetivos, mantenernos activos
y aprender cosas nuevas, pero en esta vorágine a veces olvidamos lo que
realmente importa y perdemos calidad de tiempo libre. Nos pasamos el año entero
esperando los 15 días de vacaciones para relajarnos, estar más con nuestros
hijos o hacer las cosas que realmente nos llenan y porque? Porque el resto del tiempo lo empleamos en múltiples
tareas y obligaciones, es cierto que algunas son necesarias o vitales pero
estoy segura que hay muchas de ellas que nos las imponemos y que podrían cambiar. Y de hay que me haya propuesto un reto.
El reto de empezar este nuevo curso con un cambio de actitud. De empezar a vivir mas despacio, de sentarme a desayunar disfrutando del café , de tumbarme en la terraza a leer, de dar un agradable y pausado paseo y sobretodo, el reto de conseguir que no importe si es lunes o domingo.
Pero como me conozco y se que cada año empiezo con un listado de buenos propósitos que luego voy dejando por el camino esta vez, he creado esta lamina con el manifiesto de mi vida que espero me ayude a recordar cada día lo que es importante, y como quiero vivirla.
Tampoco me he olvidado de todos los otros proyectos que quiero realizar y que también llenan y complementan mi vida. Al pensar en como podía organizarlos me vino a la mente el eslogan 12 meses 12 causas y me dije que tal si haces un calendario 12 meses 12 objetivos?
Y este es el resultado.
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