Todos los padres, los modernos de ahora y los clásicos de antes, todos tenemos una cosa en común hacerlo lo mejor posible y educar bien a nuestros hijos. Ser padre o madre significa colaborar en la educación y formación de una persona y el temor a equivocarnos nos crea cierta ansiedad.
No existen formulas mágicas, eso lo sabemos de sobras, pero algunas pautas pueden facilitarnos un poco la labor o por lo menos hacerla menos estresante.
Aquí os dejo los puntos mas importantes que se tocaron en la charla y que espero os ayuden a educar sin perder el control.
1 Empatía: es decir la capacidad para reconocer, comprender y conectar con las emociones y el punto de vista con el que lo están viviendo nuestros hijos. Os sorprendería saber lo mal que enfocamos las situaciones los adultos desde un punto de vista infantil.
La primera vez que lo entendí fue cuando estando embaraza de mi hija me leí el libro de " La crianza feliz" de Rosa Jove, os aseguro que me reí un montón con las conclusiones a las que llegaban los niños con algunas sistemas para educar como el del rincón o la sillita de pensar o como viven ellos los celos.
Lo recomiendo, con independencia de la educación o método que vosotros queráis seguir, es buenísimo en hacerte poner en la piel de un niño y entender como ven ellos las cosas y ademas os hará reír un rato.
Pero volviendo a la empatía si conseguimos empatizar con nuestros hijos estaremos creando un clima caracterizado por la convivencia, el entendimiento y la armonía.
2 Los Roles: Si nos centramos solo en el rol de padre o madre podemos caer en la insatisfacción personal y sentirnos incompletos, por eso es de vital importancia cuidarnos a nosotros mismos tanto a nivel físico como psíquico. Si nosotros nos sentimos insatisfechos e infelices afectara a la manera en como nos comportamos o toleramos ciertas situaciones y como decidimos resolverlas. Debemos autocuidarnos; tener vida social, cuidar la pareja, delegar, pedir ayuda, mantener espacios propios y tiempo de ocio. Todos estos aspectos nos ayudaran a mantener un equilibrio entre nuestro rol de padres y nuestras necesidades.
3 Los limites: para que sean efectivos los limites deben seguir unas reglas básicas:
1 Que sean coherentes
2 Que todas las personas implicadas en la educación de los niños pongan los mismos limites.
3 Ser asertivo ( ahora lo explico mejor)
4 Ser persistentes
4 Ser asertivo: es defender nuestros derechos sin agredir ni ser agredido. Os pongo un ejemplo para que lo entendáis mejor. Estáis en un restaurante y tu hijo monta una pataleta porque ya ha acabado de comer y quiere irse a jugar pero vosotros no habéis terminado de comer y el niño no puede salir solo a jugar. Un comportamiento asertivo seria el siguiente:
Madre/ padre al niño: Ya se que estas aburrido, lo entiendo, tu ya has acabado de comer y es aburrido esperar verdad? pero te pido por favor que esperes un ratito a que papa y mama acaben de comer y entonces saldremos los tres a jugar.
Seguidamente podemos ofrecer una solución como: quieres pintar en la libreta de mama mientras esperas, para que no sea tan aburrido?
De esta manera ofrecemos comprensión a su aburrimiento y defendemos nuestro derecho de acabar de comer, sin ser agresivos ni crear conflicto y ofrecemos nuestra colaboración para encontrar una solución.
Fácil verdad? y tu estarás pensando si, y como hago para decirle todo esto de manera calmada y sin enfadarme? Pues lee el siguiente punto.
5 Controlar nuestra ira Hay ocasiones en les que estamos demasiados nerviosos, cansados o irritados y es mejor aplazar la expresión de estos sentimientos hasta haber reducido la tensión. Estas claves nos pueden ayudar:
1 Identificar les señales de alarma
2 Procurar reducir la ira con: cambiando la manera de ver las cosas, darse mensajes tranquilizadores, pensar en las consecuencias de perder el control, preguntarnos si hay alguna motivo añadido para estar tan irritado...
3 Alejarse
4 Retomar la discusión mas calmados.
6 Técnicas para decirles NO Con la técnica de la Niebla: Podemos responder de manera vaga sin entrar al trapo cuando nos ataquen, nos hagan chantaje o insistan en exceso con respuestas tipo: Tienes razón, es verdad, es posible que tengas razón, a lo mejor tienes razón pero No. Por ejemplo:
Niño/ Niña: cómprame un (según edad, móvil,juguete,caramelos..)
Madre/ Padre: No, es la hora de cenar, tienes uno igual, no tienes edad..
Niño/ Niña: Pues fulanito tienes uno, eres injusta, si me quisieras, tacaña..
Madre/ padre: Es posible que sea injusta pero no te lo voy a comprar
En muchas ocasiones el No es la forma de manifestar nuestro criterio y defender nuestra postura. Cuando queremos decir que no y lo decimos sin sentir culpa, ganamos seguridad y autoestima.
En estas situaciones podemos utilizar la técnica del disco rallado: Esta técnica consiste en repetir un pequeño argumento y el No una vez y otra manteniendo la calma, sin entrar en discusiones. Insistiremos de manera calmada hasta que el niño/niña se convenza o se de cuenta que no conseguirá nada. Para que sea efectivo el mensaje verbal debe ir acompañado de seguridad y contundencia sin ser agresivo. ( y en mi opinión de una saco de paciencia)
7 hacer criticas sin ofender: Normalmente formulamos mal las criticas y lo que conseguimos con ello es una actitud defensiva en lugar de contribuir a cambiar el comportamiento de aquello que no nos gusta. No es conveniente abusar de las criticas ni utilizar palabras como: siempre, nunca, todo...
Para hacer una critica de manera adecuada podemos utilizar la técnica del sandwich: Esta técnica consiste en decir algo positivo, algo negativo, y acabar con algo positivo.
Ejemplo: El objetivo es que tu hijo sea mas ordenado, en lugar de decirle que es un desastre y un desordenado podemos decir: Que bien has jugado hoy con todos tus juguetes, ahora que están todos fuera de su sitio, puedes colocarlos para poder jugar mañana y pasarlo también como hoy.
8 Elogiar correctamente: Frecuentemente nos olvidamos de elogiar a nuestros hijos. Elogiar es un gran incentivo, es mas potente que el castigo o la critica y aumenta la probabilidad de que se repitan las conductas positivas.
Para elogiar correctamente tenemos que:
Tener una actitud positiva y evitar asociarlo a una critica ( tipo: que bien has comido hoy, haber si lo haces siempre)
Expresarlo en un tiempo próximo a la conducta
Recordar que es mejor elogiar la conducta que al niño/niña.
Y por ultimo Meritxell nos recordó que ser padres es un proceso de constante aprendizaje donde nadie tiene todas las respuestas, donde todos cometemos errores y nadie lo hace todo bien. Debemos dejar de querer tener hijos perfectos porque nadie lo es.
Espero que os haya sido de utilidad y que podáis aplicar estas recomendaciones no solo con los niños sino con vosotros mismos y os ayuden a liberar un poco del estrés que conlleva la difícil tarea de educar.
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